Microcuento — Encuentra tu voz

– ¿Y tu abuela no sospecha? Caperucita sonrió. – ¿Crees que ella vive a la mitad del bosque por gusto? No soy la primera mujer que ama a un lobo.

Microcuento — Encuentra tu voz
Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s